La perspectiva Post Coronavirus

La crisis y las oportunidades, vemos que varias marcas emplean estas palabras aludiendo al proverbio chino para vender sus productos y servicios, y tratar de enviar un mensaje de aliento y esperanza al consumidor.

¿Pero, realmente cual es el sentir del consumidor?

¿Estamos enviando el mensaje correcto?

Todos queremos salir avantes de esta crisis, pero ¿que estamos haciendo para lograrlo?

Primero que nada debemos entender cual es la coyuntura económica, cuales son las implicaciones, cuales son los sectores más afectados y cuales son los beneficiados de esta pandemia.

Algunos ven esto como una purga, como un regresar a la conciencia humana, recordar nuestras raíces y retomar los valores éticos y morales, otros más hablan de una teoría conspirativa y manejos de la elite económica para llevar a cabo un nuevo orden mundial.

Quizás ambas sean ciertas, no lo sé.  Pero lo que si es cierto es que el mundo entero no volverá a ser el mismo después de esto.

El 2020 será recordado como el año del COVID19 el parteaguas para el inicio de una nueva era, la era Post Coronavirus, el bicho mutante ha hecho en solo 3 meses estragos en nuestras vidas, cambiando por completo nuestras rutinas y hábitos, hacemos home office, e learning, compramos el super o nuestro almuerzo y otras cosas a través de una app móvil. Lo que hasta hace poco algunos de nosotros no estábamos acostumbrados a realizar.

Se acabaron las reuniones, los conciertos, cerraron miles de negocios como restaurantes, cines, gimnasios, hoteles, etc. Nos encerró en nuestras casas generando un sentimiento de miedo e incertidumbre que solo se puede comparar con un ambiente bélico.

Si, incluso las medidas y restricciones que han tomado algunos gobiernos no se veían desde la 2da guerra mundial.

Esto no es un “cisne negro”, (en términos económicos un suceso inesperado y de gran impacto, metáfora que invento Nassim Taleb en el 2008 que además decía que una vez que sucediese tiende a explicarse mediante razonamientos lógicos de manera que pudiera parecer que iba a suceder irremediablemente).

Creo que deberíamos desarrollar una nueva metáfora para este evento, por que si bien es cierto “The economist” en su portada 2020 nos dio algunas pistas, no creo que nadie tenga la autoridad cognitiva para decir al día de hoy que esto irremediablemente iba a ocurrir.

Por otro lado, sin duda el momento es complicado, pero “sin crisis no hay méritos, es en la crisis donde aflora lo mejor de cada uno, por que sin crisis todo viento es caricia” dijo Albert Einstein.

Sin duda estamos en una brecha disruptiva, y deberíamos entrar en esa brecha, es momento de hacer memoria y ver a retrospectiva lo que la humanidad ha aprendido de estas lecciones, es momento de leer, de hacer nuestro “research” para elaborar los SMART,s de nuestro negocio.

“La trágica epidemia de 1918 ayudó a crear los servicios nacionales de salud en varios países europeos”.

“La Gran Depresión y la Segunda Guerra Mundial dieron pie para apuntalar políticas de bienestar social para la humanidad”

“Los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001, o la crisis de 2008, que dejó una enorme cicatriz en los mercados financieros y los inversores de renta variable, una lección que no se olvida y que contrajo posteriormente el nacimiento de las criptomonedas y las blockchains”

Todas las crisis cambian nuestra historia, debemos tratar también de ser creativos y disruptivos, es aquí donde se ve con mayor claridad quienes poseen menos y quienes tienen el poder, a que le tememos y que es lo que más valoramos.

Esta es la verdadera “crisis del capitalismo global” que citó alguna vez George Soros.

Ahora, por otro lado.  ¿Quienes ganan?, quienes ya están generando beneficios?

El uso de redes sociales y de plataformas de mensajería instantánea creció mas de un 50%,los portales digitales de noticias ganaron más suscriptores, Amazon esta rompiendo records de compras, y en general los negocios digitales y los que invierten en marketing digital han disparado su porcentaje de beneficios. Por que sin duda la pandemia y el confinamiento han empezado a transformar nuestros hábitos de compra.

Y algunos de estos hábitos no serán transitorios, es posible que veamos el dia de mañana a muchos negocios que continúen haciendo uso del home office para disminuir gastos en pago de renta de oficinas, diversos negocios que ya están testeando este modelo se están dando cuenta que les da resultados, acostumbrémonos  a ver sucursales de banco vacías, si ya de por sí las estadísticas eran abrumadoras en torno al uso del móvil y del las apps, todo dependerá de cuanto dure la etapa de confinamiento, sin embargo el golpe hasta ahora esta haciendo mella en nuestra confianza, sin duda la sociedad entera padecerá los efectos del síndrome post traumático.

Las empresas tecnológicas también dentro del sector beneficiado se verán obligadas a acelerar los procesos evolutivos y de innovación de sus proyectos enfocados a estos nuevos hábitos y necesidades de los consumidores, en China había drones que buscaban a las personas sin tapabocas y alertaban con altavoces a la policía, Alemania e Italia usan las bases de datos de las empresas de telecomunicaciones para rastrear el movimiento de la gente, Corea del Sur alerta en tiempo real la detección de nuevos casos por medio de una app móvil.

Probablemente el dia de mañana no podremos viajar y salir del país sin un certificado médico o un dispositivo que monitoree nuestra temperatura y signos vitales.

¿Qué tanto de nuestra privacidad y libertad podríamos perder si algunas medidas instaladas bajo esta contingencia finalmente son adoptadas por el sistema?

Para los que se encuentran en los sectores más afectados, no todo está perdido.

Los desastres también traen cosas buenas, nos recuerdan nuestros mejores valores, la solidaridad, la hermandad, la compasión, los desastres nos recuerdan que no importa cuanto poseamos o cuanto dinero tengamos, somos igual de vulnerables.

Si bien las diferencias económicas y sociales persisten, todos somos presas del mismo depredador.

Las Pymes representan aproximadamente un 52% del PIB en México y son responsables de generar mas del 70% de los empleos.  Las pequeñas y medianas empresas son las que deberían estar mayormente comprometidas a ingresar en esta brecha disruptiva, están obligadas a aprender la lección y transformarse de manera digital.

Si bien el mercado de las ventas online esta generando grandes ganancias a los gigantes como Amazon o eBay, se volverá cada vez más competido, probablemente los grandes monstruos del              e-commerce ya no lo serán tanto ya que todos apuntamos al online, la necesidad de los consumidores nos obliga a estar ahí.  Y esto ya no es especulación, estamos hablando de simples reglas económicas, ley de oferta y demanda.

Y las e-commerce que ahora están ganando también enfrentarán un gran reto a partir de este año, el reto de mantenerse fuertes en el mercado, por que tienen detrás de ellas el despertar de nuevos competidores hambrientos de ventas y cada día más preparados.

Todos los empresarios, pequeños, medianos y grandes, debemos generar ideas disruptivas, debemos seguir invirtiendo en digital, las agencias de marketing digital que tengan mayor autoridad y credibilidad en el ramo serán las únicas que sobrevivirán, aquellas que ofrezcan verdadero valor y que hagan de sus clientes socios con quienes enfrentar una coyuntura económica, favorable o adversa, todo dependerá de la mentalidad con que lo tomemos.

Parece mentira, pero no todos lo entendemos, pero todos los empresarios deberíamos tener un mindset similar, unas bases ideológicas que no nos enseñan en las instituciones formativas, se aprende en situaciones de crisis, y los que hemos padecido esas crisis sabemos que debemos de mejorar o transformar procesos, reclutar nuevos talentos no deshacernos del talento, sacrificar algunos activos para costear la adquisición de nuevos clientes.

Y la reflexión es: ¿cuándo es que se le debe invertir a nuestro negocio, en época de opulencia? ¿O de carencia?

Yo diría que siempre.

Debemos ayudarnos, no autosabotearnos frenando nuestro crecimiento económico con la inactividad, tenemos que hacer girar los engranes, la incertidumbre no debe frenarnos, por que en la incertidumbre y no en la certeza es donde renacemos.

Los próximos meses son para prepararse, para invertir, invertir en nosotros mismos, ser introspectivos y superar nuestros miedos e invertir todo tipo de recursos y reinventar nuestros negocios para integrarnos a esta nueva era que está por venir.

HEDURO.